sábado, 30 de enero de 2010

BUCEO EN ISLA DE LA PLATA - ECUADOR

----- Original Message -----
From:
Javieri Gutigonza
Sent: Tuesday, January 26, 2010 2:22 AM
Subject: BUCEO EN ISLA DE LA PLATA

No podíamos dejar pasar la oportunidad de bucear por última vez en el Pacífico antes de nuestro regreso... y dado que no ha habido posibilidad de hacerlo en Galápagos, ¡qué mejor lugar que la Isla de la Plata para este buceo de despedida!

Pero la economía ya no nos permitía pasar la noche en Puerto López, así que salimos de Manta a las 6 de la mañana (hora en la que las calles están cerradas todavía...) para llegar al centro de buceo un poco antes de las 8 y poder probarnos el equipo antes de subir a la embarcación (por cualquier cosa que pueda surgir, nuestro instructor se sentiría orgulloso de nosotros si viera lo prudentes que somos)...

A las 9 y 20 (siempre hay alguien que llega tarde), salimos hacia Isla de la Plata con dos chicas que iban a realizar su última inmersión de Open Water, una señora, digamos, experimentada, el instructor, el capitán y un biólogo botánico belga que está haciendo un estudio de piqueros patas azules a través de la Universidad de Madrid en Quito (¿cómo se come eso?... cuarto en francés, cuarto en belga, cuarto en inglés y cuarto en español... ¡qué bonito es este deporte, que te permite conocer tanta gente!)...

Casi a las 11 de la mañana llegamos a los alrededores de la isla y comenzamos a equiparnos para la primera inmersión:

Lugar de buceo: Punta El Faro
Profundidad máxima: 20m
Tiempo de fondo: 40 min (Javi) y 49 min (Eri)... Si, si... nos salimos de tablas (Javi casi, Eri sin duda)... estos Aladdin... (conste en acta que nosotros seguimos sin tener uno, es cosa de los guías locales).

Y fue un buceo genial:

Distinto a los anteriores, porque había bastante corriente y nunca antes nos había tocado el mar así, pero muy bonito; una diversidad en el fondo que... ¡wow! Esponjas, gorgonias y otros corales, rayas, estrellas de colores, erizos de púas largas, de púas cortas, de púas gruesas, peces de mil colores (algunos que iban solitos y otros en bancos de peces inmensos), caballitos de mar, morenas (de hecho, vimos "la morena" mamá de todas las morenas), anguilas, peces guitarra, peces globo... Y yo (Eri), descubrí en esta inmersión la importancia que tiene bucear con una buena máscara: siempre suelo tener problemas porque se me empañan las gafas y en el último buceo (Isla Salango) me perdí muchas cosas por estar metiendo y sacando agua de la máscara para desempañarla... pero ayer... ayer buceé... sin palabras... Además, la temperatura del agua no era demasiado baja, había más o menos visibilidad y conseguimos (ahora escribiendo los dos) una muy buena flotabilidad, a pesar de las corrientes, así que sólo podemos decir que disfrutamos realmente esa primera inmersión.

Luego de subir a la embarcación a tomar algo de fruta, pasamos poco más de una hora en superficie y volvimos a equiparnos parea la segunda inmersión:

Lugar de buceo: Bahía Drake
Profundidad máxima: 12m
Tiempo de fondo: 46 min (sin comentarios).

Esta vez hizo un frío horrible (sobretodo para Eri, que siempre tiene frío)...pero se te olvida cuando te encuentras con la vida subacuática: semienterradas en la arena se escondían cientos de rayas (eran cientos por todo el fondo, de verdad, no es exageración andaluza ni ecuatoriana), peces trompeta flotando a un metro del fondo, peces loro en plena época reproductiva (lo supimos cuando vimos a algunos de ellos liberar el esperma en nuestras narices), corales de colores, una serpiente marina, una raya de tamaño descomunal (contando con el incremento de tamaño bajo el agua y calculando cuál debería ser su tamaño real, seguía siendo descomunal) y de nuevo erizos, estrellas, pepinos, peces globo, morenas, anguilas... pero, lo mejor de todo sin duda alguna, las dos tortugas que, en momentos distintos de la inmersión, se acercaron a nadar con nosotros, curiosas, enormes y, a la vez, ligeras bajo el agua... es espectacular verlas nadar, flotar, moverse con esa tranquilidad (aunque pueden llegar a ser muy rápidas si quieren)... son geniales!! Para rematar el día, al subir al barco y en pleno resúmen de los "éxitos" de la jornada, otra tortuga subió a la superficie para saludarnos y se paseó un rato al lado nuestra, dejándose fotografiar a gusto (y para gusto de todos los presentes)...

Antes de volver a Pto. López, nos dieron un almuerzo de pescado apanado con maduro, ensalada y, por supuesto, arroz... y de vuelta al centro de buceo (casi a las 5 de la tarde!!) para rellenar el Divelog y volar a Manta (que María y Vicente nos habían prestado la camioneta y la necesitaban antes de las 7:00)...

Desde luego, mereció la pena la paliza (porque llegamos a la casa reventados)... y, si algo haremos cuando volvamos por tierras ecuatorianas, será bucear en las aguas del Pacífico que, aunque no tiene nada de pacífico, es un océano impresionante...

Y digo yo, ¿cuál no lo será?

Besos a todos!!!

Eri y Javi.

P.D: Martha, no vimos ninguna manta-raya... Paquito, tampoco vimos el mero de 40kg... ¡¡pero nos acordamos mucho de vosotros!! y os echamos mucho de menos... (ya mismo)... ;-)